Al-Juarismi, puente matemático entre civilizaciones
Mientras Europa seguía sumida en la larga Edad Media y había olvidado buena parte del saber de la Grecia y Roma clásicas, el mundo islámico vivía en el siglo IX una época de esplendor. Fue así como el conocimiento de las civilizaciones griega, india y persa se reunió en la Casa de la Sabiduría de Bagdad. Allí destacó un estudioso que empezó recopilando y traduciendo las grandes obras matemáticas alumbradas durante siglos y siglos, para acabar ampliándolas creando una nueva rama: el álgebra.
Sus nuevos métodos algebraicos son la base de los que seguimos usando hoy en día para resolver ecuaciones; y también hemos incorporado al lenguaje común dos palabras, «algoritmo» y «guarismo», que derivan directamente de su nombre: Al-Juarismi (Muḥammad ibn Mūsā al-Khwārizmī). Y es que su trabajo fue el puente definitivo para que los números que usamos hoy en día llegasen a Occidente, procedentes de la India.
Multiplicó la capacidad de las matemáticas
En su tratado "Compendio del Cálculo por Restauración y Compensación" (en árabe Al-jabr wa'l muqābala), Al-Juarismi hizo por primera vez un estudio profundo de la resolución de ecuaciones, lo que multiplicó la capacidad de las matemáticas -y de las ciencias que las usan- para resolver problemas. En el siglo XII, ese tratado de Al-Juarismi se tradujo al latín en la península ibérica, donde la palabra al-jabr derivó a álgebra para designar la restauración de términos, aunque al principio su significado se redujo al ámbito médico. Por ejemplo, en la segunda parte de El Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes escribió sobre un algebrista que se encargaba de restaurar a un hombre con varios de sus huesos rotos en una pelea.
Desde poco después de su traducción al latín, el escrito de Al-Juarismi sobre el álgebra sirvió de libro de texto en Europa para estudiar la ciencia de resolver ecuaciones, estableciendo los nombres de una nueva disciplina de las matemáticas que sigue desarrollándose en la actualidad.
Otra de las obras más importantes de Al-Juarismi, "Libro del Cálculo", con los números indios, permitió la introducción en Europa (con la ayuda de Fibonacci) del sistema de numeración decimal posicional -que permite escribir cualquier número solo con los dígitos 0, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8 y 9- que es el que usamos hoy en día.
De ese texto solo conservamos una versión en latín del siglo XII, que sus traductores titularon Algoritmi de número Indorum. En esa obra, Al-Juarismi hizo una exposición tan completa del sistema de numeración indio, que se generó la idea equivocada de que nuestro sistema de numeración actual era de origen árabe.
El nuevo sistema acabó conociéndose como el de Al-Juarismi, que se deformó después de múltiples traducciones en algoritmo, vocablo que comenzó a asociarse solo a las distintas reglas de cálculo que podían realizarse con aquellos números nuevos.
Así, por ejemplo, cuando aprendemos a dividir en la escuela, los pasos que seguimos forman un algoritmo. Esta palabra acabó teniendo un significado mucho más amplio, para designar cualquier procedimiento operativo que genera, paso a paso, la solución de un problema que no puede resolverse de otro modo.
Las palabras heredadas del nombre de este prolífico autor árabe no acabaron aquí. Guarismo, derivada directamente de Al-Juarismi, asumió el significado de Cifra, aunque solo en español.
Fuentes: bbvaopenmind.com, wikipedia.org, Comunicado de copiasdigitales.com.ve.
Imagen de cabecera: Wikimedia.
Fuente: copiasdigitales.com.ve / bbvaopenmind.com / wikipedia.org