Jóvenes tomando Viagra
Su llegada revolucionó la vida sexual de los adultos que sufrían de disfunción eréctil y soñaban con una solución. Pero los beneficios del Viagra (y los medicamentos de la competencia como Cialis y Levitra) pronto se expandieron a un segmento inesperado que, lejos de tener una necesidad concreta, lo utiliza cada vez más para aplacar sus inseguridades frente al sexo opuesto.
Un estudio de la Escuela de Farmacia y Bioquímica de la Universidad Maimónides, realizado el año pasado, reflejó un aumento significativo de este hábito que se afianza con fuerza entre los adolescentes para aumentar el hedonismo y erotismo en sus relaciones amorosas.
Según se desprende del informe, 3 de cada 10 consumidores de la droga tienen menos de 21 años, mientras que un estudio previo, liderado por la misma institución, había arrojado que el 20% incurría en esta práctica.
Las razones del uso adolescente. Especialistas consultados por lanacion.com, explicaron que el miedo a no rendir lo suficiente durante un encuentro sexual, la inhibición que despierta la primera vez, el frecuente cambio de compañera (que impide conocerse mejor) o simplemente el deseo de mostrar una performance "notable", forman parte de los motivos del consumo exagerado por parte de los adolescentes.
"Frente a la inseguridad de tener un mal rendimiento sexual y por estar mal informados, los jóvenes acuden al Viagra como si se tratara de un salvador que elimina todos sus miedos. Pero, lejos de ayudar, deberían saber que están tomando un medicamento que debe ser recetado y que, combinado con otras sustancias, como la cocaína y el éxtasis, puede implicar serios riesgos para la salud", sentenció la licenciada en psicología y sexóloga clínica Diana Resnicoff.
Por lo general, el consejo de probar los efectos de la droga en sus encuentros proviene de sus mismos pares. Son los amigos los que sugieren tomarla y luego intercambian experiencias.
"Cuando lo quieren tomar no vienen al consultorio. Vienen recién cuando quieren dejarlo. Un amigo les pasa el dato. Sucede que, a veces, hay chicos que tuvieron un mal episodio y aparece alguien que les dice que con eso va a andar bien y lo terminan tomando, porque son inseguros, no porque tengan una dificultad con la erección", explicó León Gindin, sexólogo y profesor titular de sexualidad y salud de la Universidad Abierta Interamericana.
Según Gindin, muchos de ellos abusan de la dosis por creer que tienen que ser "superman sexuales" con la chica de turno.
Los riesgos del consumo exagerado. El problema se plantea, coinciden los expertos, cuando la inseguridad se apropia de ellos provocando una dependencia de tipo psicológica.
"El Viagra fue estudiado y aprobado en adultos con problemas de erección. Pero el marketing llevó a que lo usen todos los hombres. A este medicamento se le ha faltado el respeto y se ha transformado al consumo en algo muy liviano. Es un excelente medicamento para mayores de 55 años, que resulta altamente riesgoso para los jóvenes", cuestionó Marcelo Peretta, doctor en farmacia y bioquímica y director de la escuela de Farmacia y Bioquímica de la Universidad Maimónides.
Según Peretta, la hipotensión, el dolor de cabeza, el dolor muscular, la visión anormal, la urticaria, la anemia y la sordera, figuran entre los inconvenientes que puede generar su ingesta. También podría producir infartos, por la falta de irrigación cardíaca, priapismo (erección continúa por más de cuatro horas) o esterilidad, si su consumo se realiza durante mucho tiempo, ya que afectaría la calidad de los espermatozoides.
Fuente: tolucanoticias.com (con material de lanacion.com)