El lado desconocido del estrés
Nuestro cuerpo puede ser visto como un recipiente extremadamente resistente a cualquier abuso y maltrato. Le hacemos de todo, le damos alcohol, drogas, químicos, nicotina, cafeína, mala alimentación, horas interminables de trabajo, colesterol, no lo ejercitamos, no le damos suficiente agua, ni aire ya que ni siquiera sabemos respirar adecuadamente. Lo ponemos a dormir en colchones inadecuados, lo sentamos durante horas en sillas incómodas y mal diseñadas, adoptamos malas posturas, comemos apurados casi sin masticar; en fin, no lo cuidamos y él siempre aguanta todo mientras envejece y lo más importante, mientras acumula. A medida que se va llenando, nos va avisando, pero la mayoría de las veces ignoramos sus avisos. Como si esto no fuera suficiente le regalamos toneladas de estrés.
Los avisos más comunes son preocupación en exceso, temor, inseguridad, dificultad para concentrarse, tensión muscular, gastritis, dermatitis, irritabilidad, insomnio, dolores de cabeza, sequedad en la boca y dificultad de concentración, entre otros. A veces nos acostumbramos a estos síntomas (avisos) como parte normal de nuestra vida y otras veces cuando el síntoma molesta en exceso, vamos al médico para que nos cure. Por lo general después de algunas consultas y medicamentos quedamos como nuevos para seguir llenando el recipiente con descuidos y abusos.
Existen ocasiones en las que al llenarse el recipiente, comienzan a aparecer molestos dolores musculares, cansancio, depresión y trastornos del sueño. Sentimos al despertarnos que una gandola nos pasó por encima durante la noche. La sensación de descanso desaparece de nuestras vidas. Cuando este patrón se repite constantemente junto a otros síntomas como dolores de cabeza, mareos y hasta problemas digestivos, se puede estar en presencia de un cuadro de fibromialgia. A pesar de que esta enfermedad no se consigue en el diccionario, recientemente la fibromialgia ha sido reconocida por la Organización Mundial de la Salud y significa dolor en los músculos y en el tejido fibroso, ligamentos y tendones. Hasta ahora esta enfermedad no ha formado parte de las materias que se enseñan en las Facultades de Medicina. Esto dificulta su diagnóstico, por lo que es normal en pacientes de fibromialgia que antes de llegar a su diagnostico hayan peregrinado por varios especialistas sin conseguir diagnostico definitivo alguno y con todos los exámenes normales.
Aunque aún no se sabe con certeza, es probable que una respuesta anormal al estrés desempeñe un papel fundamental en el desarrollo de la enfermedad. Adicionalmente la falta de sueño o el mal dormir, impide la reposición de la serotonina, un neurotransmisor que regula le resistencia al dolor del cuerpo humano. La mayoría de los que sufren la enfermedad reporta un sueño de mala calidad.
Información complementaria en "Fibromialgia" y:
– "La Paliza Misteriosa"
– "El lado desconocido del estrés"
– "Frida Kahlo sufrió de fibromialgia"
– "12 de Mayo: Dia mundial del Sindrome de Fibromialgia y Fatiga Crónica"
– "Aprobado medicamento para el tratamiento de la fibromialgia"
Fuente: Ernesto Llorens Fauvelle – Feliz (Boletín Electrónico Gratuito citado por innap.com)