La psoriasis debe ser tratada toda la vida y de manera contínua
Según los dermatólogos César González y Edgar La Rotta, el paciente debe entender que esta patología no solamente afecta la piel, sino que también puede comprometer otras partes del cuerpo como las articulaciones
En la psoriasis, el proceso de regeneración celular de la piel ocurre con una frecuencia rápida, lo que genera una acumulación de células muertas en la superficie cutánea. Por esta razón, esta patología se manifiesta con la aparición de escamas, piel rojiza y manchas blanquecinas, en cualquier parte del cuerpo. No obstante, quienes la presentan deben estar atentos a su evolución y conscientes de que esta enfermedad requiere tratamiento y evaluación rutinaria de por vida.
«Todo paciente con psoriasis, debe entender que su enfermedad no es cutánea, sino sistémica. Éstos pueden presentar complicaciones cardiovasculares, diabetes, obesidad, y tener mayor posibilidad de sufrir de artritis psoriásica, la cual puede conllevar a la deformidad articular. Por lo tanto, la psoriasis requiere de un tratamiento médico, que en algunos de los casos puede ser tópico, convencional o biológico. Lo importante es que se puede tratar y es posible alcanzar su remisión», indicó el doctor César González, dermatólogo.
De acuerdo al también dermatólogo, Edgar La Rotta, precisamente al afectar esta patología otras partes del cuerpo, recomendó la evaluación con un equipo multidisciplinario de médicos. «Principalmente, es necesario el chequeo con el dermatólogo, el reumatólogo, el cardiólogo, el endocrinólogo y el internista,», recalcó. Asimismo, indicó que «generalmente el cuadro clínico de la psoriasis es muy clásico y relativamente fácil de hacer el diagnostico, pero una vez detectada, requiere de una evaluación y tratamiento de por vida».
A esto último, La Rotta enfatizó lo siguiente: «Una cosa es tenerla, y la otra es padecerla. Mientras se haga un tratamiento, no la padecerá, a pesar de que la tenga. Una vez seleccionada la terapia y se haya alcanzado la remisión, el paciente no está curado, está en control. Por lo tanto, se debe establecer un ciclo de consultas de control,» explicó.
Por otra parte, el doctor González detalló que es necesario un cambio en el estilo de vida para lograr una mejoría en la efectividad del tratamiento aplicado. «Controlar el peso es necesario, hacer ejercicio y comer sano también. Dejar de fumar y beber, son actos que deben abandonarse. Ambos son factores que exacerban la enfermedad, y por supuesto, disminuir el estrés también es fundamental,» concluyó.
Fuente: comstatrowland.com