Especialidades médicas

Gripe aviar: Entre el peligro y la acción

Las pandemias del siglo XX

Sin embargo, las bases moleculares que determinan la habilidad de un virus para propagarse fácilmente en un rango de hospedadores y su capacidad de producirle una enfermedad o patología, no están totalmente resueltas aún. En realidad, decir 'el virus mata' es una expresión ya que ante la infección viral se desencadena una serie de respuestas inflamatorias que contribuyen a la patología y pueden ocasionar la muerte. Aun así, el virus mata las células donde replica (en este caso las del árbol respiratorio) y, según lo que inocule a estas y la posibilidad de respuesta del huésped, esto también puede conducir a una disfunción extrema que ocasione la muerte.

El virus influenza A (H1N1) del 18 fue altamente patógeno y los infectados morían rápidamente (entre 24 a 72 horas) de una neumonía viral, es decir, por acción directa del virus y no por otras causas, de ahí la expresión utilizada. Es altamente probable que este virus haya sido de origen aviar pero sus precursores se desconocen aún. En 1957, surgió un nuevo virus A (H2N2) por reasociación genética entre los virus humanos circulantes y los aviares y se constituyó en el virus de la 'gripe asiática' que reemplazó a su antecesor, el H1N1. Si bien tuvo un importante impacto en la salud pública, fue mucho menor que el de 1918 y similar al de la pandemia de virus de Hong Kong de 1968 mediante la cual se introdujeron en la población humana los virus A (H3N2) originados por una nueva reasociación de genes de virus humanos y aviares. Por último, hubo una reintroducción de virus H1N1 en 1977 similares a los de 1918 aunque con algunas mutaciones; no se descarta un accidente de laboratorio para explicar este hecho.

Hay evidencias de que los virus de 1957 y 1968 se originaron en China así como que algunas variantes antigénicas circulan en China dos años antes que en Europa y Norteamérica. Se piensa que aquella región provee un nicho ecológico apropiado para la emergencia de nuevos virus de influenza con potencial pandémico debido a la proximidad en que conviven poblaciones humanas de alta densidad, cerdos y aves domésticas y silvestres, lo que facilita la reasociación genética de virus de diferentes especies y también la aparición de nuevas variantes antigénicas. Sus prácticas tradicionales de crianza de animales junto con una gran incidencia de hogares que poseen aves de traspatio en zonas rurales y la circulación de influenza durante todo el año, facilitan estos hechos.

Transmisión transitoria de virus aviares al hombre

El virus H5N1, que infectó a humanos en 1997 en Hong Kong, se originó a partir de aves acuáticas de Eurasia y pasó al hombre reteniendo características de los virus aviares como el tipo de unión al receptor. Está demostrado que los receptores celulares que permiten el ingreso del virus a la célula hospedadora tienen características químicas diferentes según se trate de virus aviares o humanos y también se sabe que el cerdo posee ambos tipos de receptores por lo cual se lo considera un perfecto 'balón de mezclado' de los virus provenientes de dichas especies. Como antecedente, en 1996 se produjo un brote importante de 'influenza A de alta patogenicidad' (IAAP) en criaderos de aves en China y, al año siguiente, otro brote en aves en Hong Kong seguido de los primeros casos humanos en los que se aisló un virus influenza con características de virus aviar en todos sus genes. Se había demostrado que los virus de las aves podían infectar directamente al hombre. En todos los casos de pacientes afectados en este evento de 1997, se documentó el contacto directo con las aves enfermas y no hubo transmisión interhumana. El virus fue erradicado exitosamente mediante el sacrificio de las aves afectadas en Hong Kong, lo que determinó un intervalo de tranquilidad por algunos años.
Pero los virus precursores de esta cepa de alta patogenicidad continuaron circulando en China en aves silvestres y el H5N1 de 1997 fue rápidamente reemplazado mediante reasociaciones genéticas por virus que tenían características de alta patogenicidad para pollos y patos. Así, en 2002 se describió un nuevo genotipo del H5N1 con la rara habilidad de ser altamente patógeno para patos y otras aves acuáticas, fenómeno no observado previamente ya que estas aves son los reservorios naturales de estos virus y usualmente conviven con ellos sin enfermar. Nuevos casos humanos surgieron en Hong Kong en febrero de 2003 seguidos de varios brotes en aves de granjas que se extendieron a Corea, Vietnam, Japón, Tailandia, Laos, Malasia, Indonesia y China informándose de un total de 35 casos humanos con 24 muertes hasta marzo de 2004, estos últimos en Tailandia y Vietnam.

Comienza una segunda onda de brotes en el sudeste asiático en el que se identifica que un genotipo, Z, de los virus H5N1 es el dominante manteniendo su capacidad para matar aves acuáticas, hecho relevante e inusual en este reservorio natural. La eficiente transmisión viral entre las aves de corral favoreció la expansión regional del virus que resultó en la pérdida de más de 100 millones de aves entre las que enfermaron y las que se sacrificaron. Durante 2005, Camboya e Indonesia se agregan a la lista de países afectados con casos humanos al mismo tiempo que se confirmaron brotes y muerte de aves migratorias pero sin casos humanos en Rusia, Kazajstán y Mongolia.

Por último, recientemente, en enero de 2006, se produjo en Turquía un brote de H5N1 en aves de corral con transmisión a humanos que desencadenó una alerta inmediata en Europa por encontrarse a sus puertas. Estas múltiples oportunidades de transmisión exitosa hacen temer que si este virus llega a tener una reasociación con genes de virus influenza humanos, o bien adquiere una mutación que lo adapte convenientemente, pueda constituirse en el próximo virus pandémico siempre y cuando desarrolle la capacidad de tener buena transmisión entre los seres humanos.

Otros candidatos

Existen otros virus de influenza aviar que ocasionaron casos humanos documentados como los virus de influenza A (H9N2) que fueron aislados de casos humanos con infecciones leves autolimitadas en China y Hong Kong. También hay evidencias serológicas (en sangre) de su difusión en población sana de esta región y su propagación en cerdos, lo que contribuye a señalarlo como posible candidato a ser un virus pandémico. Un hecho de importancia ocurrió en el mes de marzo de 2003 en Holanda, durante un brote de influenza aviar en granjas producido por un virus IAAP H7N7. Durante dicho brote, se infectaron 82 personas que estuvieron en contacto con las aves enfermas de las cuales falleció una –un veterinario. La mayoría de los pacientes presentaron conjuntivitis y solo en algunos casos una enfermedad respiratoria. Se los trató con antivirales específicos y se les suministró la vacuna habitual de influenza para evitar reasociaciones entre el virus aviar H7 y virus humanos circulantes, en el caso de producirse una infección concomitante. También se describieron tres casos de contagio interhumano en familiares de los trabajadores de la granja sin propagación posterior.

Situación actual. Alerta

No es posible actualmente conocer si el H5N1 es o será capaz de adaptarse a los humanos para propagarse eficientemente mediante aerosoles (suspensión de sólidos en gases) –con lo que se iniciaría una pandemia de influenza–, ni tampoco el tiempo que esto le demandaría. Estudios realizados con el virus de 1918 sobre la base de la tasa de reemplazo de aminoácidos, han estimado que debieron transcurrir varios años antes de que ocurrieran todos los cambios genéticos necesarios para la adaptación del virus aviar a humanos. El estudio de las secuencias genéticas de los virus H5 desde 1997 hasta 2004 reveló que algunos aislamientos humanos poseen algunos de los cambios de aminoácidos que demostraron ser importantes para que el virus pandémico de 1918 infectara eficientemente a humanos. Se considera que nuevos cambios serían imprescindibles para que finalmente el virus se adaptara. Por eso cabe preguntarse si no han sido exagerados los anuncios de riesgo de pandemia a causa de la gripe aviar. La realidad es que los virus H5N1 que han sido estudiados detalladamente en todas sus características son presentados hasta el presente como virus aviares pobremente adaptados al hombre para el cual no es muy infeccioso pero sí es altamente patogénico. Este bajo riesgo de infectarse pero alto riesgo de contraer una enfermedad peligrosa es un mensaje de difícil comunicación. Lo que sí es evidente es la alta tasa de mortalidad demostrada en los casos documentados y el impacto económico que causa la epizootia en las aves de corral ya sea desde el punto de vista de las exportaciones tanto como para las comunidades rurales de los países asiáticos donde constituyen una importante fuente de proteínas. Se calcula que la población China estimada en 1300 millones de personas requiere anualmente de 14.000 millones de aves domésticas.

Preparación para la pandemia

A nivel mundial, se están siguiendo recomendaciones generadas por continuas consultas de expertos convocados por la OMS. En primer lugar, es necesario contar con la información adecuada para poder realizar una evaluación correcta de los hechos, principalmente en aquellos países donde los virus H5N1 están presentes. Todos los datos disponibles en relación con la salud humana y animal deben ser informados de rutina y sin demora. Todos los sectores implicados en la salud humana y animal desde los organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la Organización Internacional de Epizootias (OIE) y la OMS hasta los niveles locales, deben coordinar sus acciones de vigilancia epidemiológica, virológica y clínica, con el consiguiente intercambio de información. También se deben coordinar mecanismos de intercambio de información detallada sobre las características genéticas y antigénicas de los virus H5N1 circulantes entre diferentes laboratorios y países para facilitar las comparaciones entre los virus de distinta procedencia y evaluar los cambios ocurridos.

Todos los países, hayan sido afectados o no al presente, deberán desarrollar o finalizar sus planes operacionales y prácticos de preparación para la pandemia. También se recomienda que los países encaren ejercicios de simulación de brotes para evaluar la posibilidad de tener una rápida y eficiente respuesta. Por otra parte, la OMS está trabajando continuamente en el establecimiento de canales adecuados de colaboración internacional para reducir el impacto de una pandemia de influenza, que incluyen, además, una reserva de drogas antivirales que podrán ser provistas rápidamente para su uso en brotes de H5 en humanos cuando sean evaluados como de probable propagación regional.

En relación con las vacunas humanas para la cepa pandémica, se intenta disponer de los mecanismos adecuados para que, una vez obtenidos los primeros lotes, puedan ser distribuidos en los países afectados antes de declararse el estado de pandemia, en la idea de aumentar paulatinamente la producción mundial de vacuna para tener mayor número de dosis disponibles en una segunda onda de propagación viral.

Respecto del control de la influenza en aves, se ha visto que se logra detener la aparición de casos humanos cuando es controlada o eliminada la epizootia. Además del sacrificio de los animales enfermos y los potencialmente infectados, se aconseja recurrir a la vacunación de las aves de corral, medida que demostró ser eficaz en algunos países afectados.

Para conocer el texto completo de este trabajo visite el sitio de la revista cientifica Ciencia Hoy.

Lea el articulo "El virus de la gripe aviar" en Ciencia y Tecnologia.

Fuente: Vilma L Savy – www.cienciahoy.org.ar

Publicaciones relacionadas

Mira también
Cerrar
Botón volver arriba