Economía venezolana se contrae más de lo esperado
En Venezuela, las estadísticas oficiales, publicadas ayer, revelan que la recesión es de 3,3%, más fuerte de lo previsto. Una situación como ésta no se daba desde 2003 en este país que es el mayor exportador de petróleo latinoamericano.
Las previsiones hablaban de una caída de 2,9%. Pero la contracción, confirmada, alcanza el 3,3%. El presidente del Banco Central de Venezuela, Nelson Merentes, atribuye este mal resultado a «la crisis económica global, el debilitamiento de los precios del petróleo y los recortes de producción acordados en el seno de la Organización de Países Exportadores de Petróleo» (1).
No cabe duda de que, con un barril de crudo vendido en 2009 a un promedio de 57 dólares, la economía venezolana no podía mantener el ritmo de crecimiento que había sido el suyo desde 2004. Sin embargo, el menor precio del carburante no explica todo, según analistas contactados por el diario opositor El Nacional, que atribuyen también la deterioración económica a «la regulación de precios vigente desde 2003, la congelación del tipo de cambio durante 5 años, las expropiaciones de empresas productivas y la falta de diálogo con el sector privado».
Las cifras parecen hablar por sí solas. De 13 actividades económicas no vinculadas a la industria del petróleo, 9 decrecieron el año pasado. Entre ellas, las más afectadas fueron el transporte (-16,9%), el comercio (-13,9%) y las manufacturas (-6,9%). Si el sector público creció en un 0,9%, el sector privado se contrajo en un 4,5%.
El gobierno prevé que la situación se revertirá este año, con un crecimiento de 0,5%.
Contracción económica, devaluación, inflación (27% en 2009, según el semanario especializado británico The Economist), crisis energética: las dificultades golpean a la puerta de la revolución bolivariana. Y tanto más cuanto que la fuerte devaluación decidida el 8 de enero pasado podría sumar, según el propio ministro de Economía, Alí Rodríguez, de 3 a 5 puntos porcentuales a una inflación que es, desde ya, la más alta de América Latina.
Los expertos consultados por The Economist no creen que esta inflación tenga un efecto benéfico sobre las exportaciones de un país que, en palabras de la consultora Síntesis Financiera, citada por el semanario, no cuenta hoy con ninguna industria exportadora no vinculada al petróleo.
(1) Citado por el diario El Nacional.
Fuente: rfi.fr