Jóven alemán golpeado por un meteorito
Según información publicada en The Telegraph, un jóven de 14 años fue herido en la mano por un meteorito del tamaño de un guisante, dejándolo con una cicatriz en la extremidad.
Gerrit Blank |
De acuerdo al reportaje, Gerrit Blank de Alemania, declaró "Cuando me golpeó me tumbó y pasó a suficiente velocidad para terminar enterrado en el suelo". El periódico británico dice que astrónomos analizaron el objeto confirmando que efectívamente se trata de un meteorito
Normalmente la mayoría de estos objetos del espacio se vaporizan al chocar con la atmósfera, comunmente creando el fenómeno de "lluvia de estrellas" cuando arriban en gran volumen. Incluso algunos meteoros relativamente grandes, tanto quizás como un pequeño automóvil, se romperán o explotarán al sufrir la fricción de la atmósfera.
De todos modos hay unos pocos reportes de casas y automóviles que han sido chocados por meteroritos, y muchos más casos de rocas espaciales que logran sobrevivir hasta llegar a la tierra y son luego encontradas.
Pero casos de meteoritos golpeando a humanos son extremadamente raros, y no se conoce de ninguno que haya matado a una persona.
De acuerdo con space.com, el 30 de noviembre de 1954, Ann Hodges, una ama de casa de Alabama, tomaba una siesta cuando fue despertada por un meteoro de 1,4 Kg que atravezó el techo de su casa, golpeó un mueble y terminó en el suelo después de golpearla en la cadera, dejándola con una clara marca.
La misma publicación reporta el caso de una gran bola de fuego que explotó con gran estruendo en la atmósfera, un 9 de octubre de 1992. Uno de los pedazos causó un agujero en el Chevrolet de Michelle Knapp, quien no ocupaba su vehículo, por suerte. Poco después, el 21 de junio de 1994, cuenta space.com, José Martín paseaba con su automóvil cerca de Madrid, con esposa, cuando un meteoro de dimensiones similares al de Alabama atravezó el parabrisas, dobló el volante y terminó en el asiento trasero.
Más recientemente, en 2004, un inmensa roca espacial de aproximadamente una tonelada explotó sobre Chicago, despertando a los residentes. Fragmentos llovieron sobre la ciudad y los alrededores, muchos de los cuales pudieron ser encontrados por habitantes de suburbios al norte de la urbe.
Fuente: cienciaytecnologia.net