Más que Diseño Inteligente
Los estudiosos involucrados en lo que ha llegado a conocerse como el "movimiento de Diseño Inteligente" merecen respeto. Nadan contra la poderosa marea del naturalismo, y los felicito por sus esfuerzos e integridad. A la vez, sin embargo, siento la necesidad de aclarar una distinción sutil pero significativa entre las metas de ellos y las de la organización que represento, Reasons To Believe.
Los proponentes del Diseño Inteligente (DI) se abstienen de hacer una identificación específica del Diseñador, y tienen sus motivos. Muchos trabajan en universidades y conocen de primera mano la "resistencia" (escogiendo un término suave) al teísmo cristiano de los fervientes naturalistas y abiertamente no teístas. Dado que la pared de resistencia parece tan impenetrable, proponen un avance paso a paso contra el paradigma reinante. Buscan establecer primero la posible existencia de algún diseñador inteligente indefinido, luego la probable existencia de dicho diseñador y luego, tal vez, discutir las características (posiblemente) discernibles del diseñador. En este último paso, los cristianos del movimiento podrían proponer al Dios de la Biblia como el diseñador probable.
Una ironía de este enfoque minuciosamente cauteloso es que el naturalismo podría morir de causas naturales antes que los propulsores de DI alcancen el paso dos o tres. En los escalones superiores de la investigación y erudición, la fragilidad de las teorías naturalistas se reconoce abiertamente cada vez más. Aun cuando los proponentes de DI no hagan nada para exponer las insuficiencias e inconsistencias de la explicación que ofrece para el cosmos y la vida, el naturalismo podría autodestruirse.
Ganar el argumento a favor del diseño sin identificar al diseñador produce, cuando mucho, un modelo de orígenes impreciso. Este tipo de modelo hace escaso o ningún impacto en la comunidad de científicos y demás eruditos. Un modelo de este tipo no se presta a la verificación, ni puede hacer predicciones específicas y creíbles. En ambos aspectos los eruditos, especialmente los científicos, serían reacios a reconocer la validez del concepto y prestarle atención seriamente. Este enfoque tampoco les ofrece dirección espiritual.
Cuando hablo en universidades y otras partes, veo un desafío mayor para el cristianismo que el naturalismo: el desafío de una espiritualidad vaga o idiosincrásica, una fe separada de la verdad objetiva y la legítima autoridad espiritual. De hecho, prácticamente todas las formas de espiritualidad, excepto el cristianismo, parecen estar de moda entre las nuevas personas "espirituales", que tienden a ser menos receptivas que los no teístas al evangelio cristiano. En otras palabras, llevar a un no teísta a creer en un "diseñador inteligente" podría ser más dañino que beneficioso espiritualmente.
La experiencia me persuade de que éste es el momento para un enfoque directo, un único salto en la refriega por los orígenes. Introducir un modelo de creación verificable científicamente representa un salto de este tipo. Tiene simultáneamente fuerza científica y espiritual. Crea confianza, estimula la discusión, alivia una tensión innecesaria acerca de agendas religiosas ocultas y vuelve la atención rápidamente y provechosamente hacia las pruebas y las predicciones.
Este enfoque de un modelo de creación muestra un tipo de confianza que está dispuesto a aceptarla vulnerabilidad, en vez de evitarla. Este modelo no sólo acepta gustosamente los tipos de escrutinio críticos aplicados a modelos no teístas, sino que también invita al refinamiento y a la comparación crítica con otros modelos teístas y deístas.
Una discusión y una crítica sinceras de los diversos modelos de orígenes, incluyendo varios modelos de orígenes cristianos, pueden tener un impacto positivo en el avance de la empresa científica como un todo. Los dogmas enquistados y la corrección política sólo han obstaculizado por muchos años el avance hacia la construcción de un cuerpo de conocimiento. La atmósfera restrictiva a veces parece palpable, de lo cual pueden dar fe muchos profesores e investigadores que he conocido.
He aquí una oportunidad para ejemplificar la libertad que existe en Cristo. La verdad no es ninguna amenaza para el cristiano. La verdad en el terreno científico, que puede ser verificada directa o indirectamente, siempre será consistente con la verdad en el campo espiritual. Y, a pesar de protestas de todos los costados, la verdad en la naturaleza debe estar conectada con algo, o Alguien, más allá del mundo natural; ese algo o Alguien que es responsable de la existencia y las características de la naturaleza.
La característica más importante del enfoque del modelo de la creación es que desafía la vaguedad y la subjetividad espiritual de frente. Demuestra, a la vez que defiende, la legitimidad de la autoridad bíblica y las afirmaciones de verdad de Jesucristo. Para mí y mis colegas de RTB todo se reduce a esto: la verdad siempre señala al buscador de la verdad dónde está su Fuente, la única persona de la historia que pudo hacer y respaldar la afirmación: "Yo soy la verdad". Es esto lo que hace que la ciencia sea tan divertida y fascinante.
Traducción: Alejandro Field ― Original: More Than Intelligent Design
Nota del editor:
No verán frecuentemente textos de fuentes teocráticas en TecnologiaHechaPalabra, mucho menos en cienciayleyenda, pero nos hemos tomado la libertad de incluir ésta, con el fin de permitir conocer una visión distinta, en este caso de un conocido defensor de la visión cristiana del creacionismo. Aunque el autor usa como referencia la idea del 'diseño inteligente', que todavía está lejos de ser aceptada por la ciencia formal, para ir incluso más allá, esperamos que el aporte sea informativo y enriquezca la cultura de nuestros lectores.
Voltaire (1694-1778)
Fuente: Hugh Ross – razones.org