Prometen vida sintética en unos años
Están trabajando en la creación de vesículas sintéticas, imitación de las membranas celulares naturales, como primer paso en la creación de vida sintética. Se espera que antes de diez años se disponga ya de las primeras células creadas por el hombre a partir de material inanimado. En ese momento se habrá creado vida artificial.
Varios grupos de investigadores trabajan desde hace unos pocos años en la creación de vida sintética. Una vez se consiga esperan crear microorganismos a medida que realicen funciones beneficiosas para el ser humano. Uno de los grupos que persiguen esta meta es ProtoLife en Venecia (Italia). Mark Bedau, jefe de operaciones de esta compañía, afirma que este logro tendrá un impacto enorme en el mundo. Craig Venter también persigue la misma meta.
La primera célula sintética no va a ser espectacular, será un organismo simple de genoma mínimo, pero será la prueba evidente de que la creación de vida artificial es factible. Esta protocélula tendrá el potencial de arrojar nueva luz sobre nuestro papel en el Universo, según Bedau. Posiblemente será un tema sobre el que se discuta en la sociedad, porque bajo el punto de vista filosófico, o incluoso teológico, su influencia será innegable.
Por otro lado se podrán obtener aplicaciones prácticas inmediatas: células artificiales esclavizadas para desempeñar determinadas funciones nos proporcionaran combustibles, medicamentos, eliminarán tóxicos y ayudarán a reducir la contaminación y el efecto invernadero.
Para conseguir la protocélula sintética se necesitan, según Nedau, dar varios pasos:
– Crear un contenedor, formado por una membrana que haga las veces de pared celular, para mantener los orgánulos y el material genético a salvo en el interior.
– Implementar un sistema genético que controle las distintas funciones de la célula y que permita la reproducción y mutación. Este sistema debe de tener la capacidad de cambio necesaria como para permitir la adaptación al ambiente.
– Iniciar un metabolismo que a partir de sustancias tomadas del medio permita a la célula extraer energía.
Jack Szostak del Harvard Medical School predice que en los próximos seis meses los científicos reportará la consecución del primer paso (la creación de una membrana celular) debido a la facilidad con la que se puede conseguir este tipo de membranas usando ácidos grasos. Según Szostak, una vez que el contenedor esté listo sólo hará falta añadir el material genético adecuado y dejar que la selección natural opere, dejando a la evolución que haga el trabajo duro.
ProtoLife ya trabaja con vesículas artificiales (ver foto) que pretenden imitar a las membranas celulares naturales y que son creadas a partir de constituyentes elementales.
Steve Benner de la Foundation for Applied Molecular Evolution en Gainesville (Florida) persigue la misma meta mediante la creación de un «ADN» basado en 8 bases nitrogenadas en lugar de las cuatro habituales (A, C, G y T). En este caso incluso el ADN sería sintético y no una copia del natural.
Se descartan peligros provenientes de estas células sintéticas. Estas células serán, en un principio, tan débiles que sólo podrán sobrevivir en condiciones ideales de laboratorio.
Dentro por tanto de no mucho tiempo habrá de nuevo otra revolución copernicana que se sumará a la del mismo Copérnico o a la de Darwin. Ya sólo faltará encontrar vida inteligente en el Cosmos para completar el círculo.
Fuente: neofronteras.com