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Javier Vidal, Director del musical Asia y el Lejano Oriente
Regresando a mis quehaceres de comentarista de cultura
Por: Julio C. Alcubilla B.
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Una entrevista con el actor, periodista, dramaturgo, director teatral venezolano, generoso de cordialidad, Javier Vidal Pradas, apreciado interlocutor, nos permite analizar a profundidad lo que fue su montaje de "Asia y el lejano oriente", obra del no menos célebre dramaturgo Isaac Chocrón. Surgiendo así un acercamiento de esta a esta propuesta escénica, llevada a cabo a finales de 2014. La cual se me había quedado sin publicar entre muchos otros trabajos, que me propongo dar a conocer en este nuevo regreso. Javier Vidal, es Presidente de la Fundación Isaac Chocrón en Venezuela, en esta exclusiva plena de revisiones, historia y escuela del teatro de Venezuela y el Mundo, argumenta sobre su realidad política y compromiso con nuestro país.
¿Cómo logró a través del formato de un musical, la teatralidad de Chocrón: su agilidad, esas propuestas de diálogos recortados, que caracterizan la obra de este dramaturgo?"
Esta es una pieza que fue escrita hace cincuenta años y yo me acerque a ella como si fuese un clásico, como si me entregara a ella con todas las licencias del tiempo y espacio que me fuesen permitidas. Como me le acercase a un Calderón de la Barca, a un López de Vega, a un William Shakespeare o un mismo O'Neill. Los cuales lograron piezas que de alguna manera forman parte del imaginario de un país, de una dramaturgia intimista.
En tal sentido observé que en algunos cuadros de esta pieza, tenían esa extensión de dialogo muy de la década de los sesenta. Cuando uno ve, observa y lee a Shakespeare, identifica que en su estructura de cinco actos hay que de alguna manera que revisarla, para no caer en una lectura simple. Como la que hizo de esta obra "Asia y el lejano oriente" de Isaac Chocrón, Roman Cahlbaud, en 1966 y luego en 1984; ni como se si alguien actualmente ha logrado una lectura alternativa.
Ante ello lo que planteo es rescatar el espíritu de Chocrón, él ya no está con nosotros, tiene una dramaturgia cerrada, ya lamentablemente no va a escribir más. Por ello pretendo recrear lo que considero que en la época que él la escribió y cuanto Chalbaud no se atrevió a mostrar, hacer un musical.
"Asia y el Lejano Oriente", sigue siendo una obra de teatro en la cual eventualmente existen las posibilidades de un baile o de unos efectos musicales. Cuando se estrenó, nada más Marcelo Planchart tocaba la batería, al hacerla en 1984, Vinicio Ludovico diseñó una musicalización de algunos seis cuadros, momentos en los cuales se bailaba y eventualmente se decía musicalmente algo. Aunque la música era muy uniforme, nos recordaba un poco los gingles publicitarios, aunque nadie recordaba ninguna canción. Para esta oportunidad me dije: ya que esta es una fábula, aunque estén hablando de Asia, un país que no es el nuestro, al utilizar sonidos musicales y ritmos nuestros, lograríamos en esta versión hacerla más de nuestra idiosincrasia. Se escuchó un vals andino que ubica a las nostalgias de los burgueses; que sienten que el tiempo pasado siempre fue mejor. Hubo un bolero que representaba el Caribe, como el son y la salsa casino. Se escucharon por igual esos ritmos contemporáneos como el reggae, ska y algo de jazz, el cual tuene un guiño a vox fox. Hubo un tango debido a que uno de los cuadros es sobre la guerra; el tema bélico y el sentimiento trágico del tango podían funcionarme muy bien. También góspel y el lírico, en el cual no partí de un texto directo de a obra, pero es un saludo, que marca el espíritu atento de la pieza, expresado Isaac Chocrón.
En tal sentido hice una lectura que marcaba no solamente el espíritu de toda la obra y se termina diciendo "cuánto vale un país", sino una propuesta un poco más brechtiana. Esto es una fábula, pero nosotros podemos terminar vendiendo o regalando al país, allí es cuando incorporé el ritmo de bachata, propuesto por los maestros musicales del montaje.
Dentro del contexto del texto hablado y el texto cantado, ese trabajo en el que el actor o actriz, debe también ser un cantante y hasta conocer de baile, ¿cómo se logra allanar esa memoria del talento, para lograr lo que estuvo persiguiendo?
Realmente el equipo estuvo muy bien integrado, conté con actores con potencialidades: actuaban, bailaban y cantaban; por supuesto uno más que otro. En Venezuela aún no contamos con elencos integrales, porque ni las escuelas los están formando, ni tampoco hay un mercado que tenga la exigencia o competitividad para que ello exista. El actor considera en tal sentido, "¿para qué tengo que cantar o bailar?", si aquí los musicales no son el fuerte. Sin embargo, si vemos últimamente todos los años se hace un musical en Venezuela, y a veces dos o tres. Algo está pasando, obviamente no es Broadway, debemos comprender que estamos en una ciudad como Caracas. Pero considero que es hora que ya las escuelas como los mismos actores, que se forman en las mismas sobre las tablas, deben integrarse para saber cantar, para tener conocimientos, de música y bailar, aunque esto último es más sencillo, para el actor o actriz venezolano, hay más costumbre.
Las obras de Chocrón brindan al espectador dos niveles de percepción: emocional e intelectual. ¿Desde el punto de vista de la obra "Asia y el lejano oriente", dónde colocó el énfasis dramatúrgico y donde considera se destacó la mano del director?
La emotividad ciertamente es algo muy importante para todo el espectáculo teatral, el actor lo que debe tocar primero es el plexo solar. Las piezas de Chocrón no es que sean intelectuales, no me gusta ese término, pero sí reacciónales, es decir invitan a razonar. A que el sentimiento no se quede solamente en el corazón, sino que suba y alcance esa posibilidad de reflexión. Al final de la pieza, comienzan a motivar, además ameritan sean divertidas, pero logrando se alcance razonamiento en ese proceso.
¿Analizando los temas de esta obra, cuáles suponen el nivel interpretativo más importante, considerando su rol de dirección y el ser el Presidente de la Fundación Isaac Chocrón?
Realmente al abordar un espectáculo musical en Venezuela, no creo que tenga poca convocatoria, lo que sucede es que los musicales son muy onerosos, cuestan mucho. Cuando Imagen Producciones de Carlos Escofio, Chepita Gómez Sigala y Marbella Molina, los que manejan esa empresa, me invitaron para dirigir "Asia y el lejano oriente", tenía la garantía de que se podía realizar, por el manejo presupuestario de esa organización. Este fue un montaje en el que hubo diez actores, una microfonía muy compleja, para espacios que además no son tan grandes.
El Trasnocho, no tiene mucha amplitud, lo cual trae problemas con las ondas, es decir, para un musical existen más inconvenientes para su montaje. Esto por una parte y por la otra el hecho que como bien dices, al ser el Presidente de la Fundación Isaac Chocrón, soy en extremo cauteloso de que el mensaje, su espíritu y su cuerpo o texto, llegue hacia el nuevo público.
Por ello me permito hacer un link con tu primera pregunta, en la cual expuse que abordé esta pieza como si fuera un clásico, debido a que existen una o dos generaciones que no conocen muy bien a Isaac Chocrón, o no conocen la pieza "Asia y el lejano oriente", la misma forma parte de su imaginario. Un referente contextual de la época y creo que hoy por hoy lo garantizo, resultó toda una innovación y el público se sintió sorprendido.
En "Animales Feroces", Chocrón se vale de un argumento repleto de tensiones dramatúrgicas y propone una técnica denominada "el desorden analógico". La cual incluye escenas simultáneas y retrospectivas, ¿el espectador acucioso que logró analizar en éste montaje de "Asia y el lejano oriente"?
En verdad cuando Isaac Chocrón escribió "Animales Feroces", no era fácil la cosa, estaba bastante influenciado por Arthur Miller, el cual fue el primero en imitar un lenguaje cinematográfico en la escena teatral. El teatro hasta la década de los 40, era proyectista, como todas las piezas de William Shakespeare, el tiempo resultaba hacia adelante.
Eso de empezar en un presente, ir al pasado, al futuro y volver al presente, era muy complejo. Esto lo tenía "Animales Feroces", en tanto que el personaje protagónico está muerto y resulta que aparece. En Asia y el lejano oriente, es mucho más brechtiano por una parte y por la otra está muy influenciada con ese nuevo teatro que se estaba haciendo en Nueva York. Me refiero al "Open Teather","Oh Calcuta", piezas fragmentadas, nuevamente Brecht. Con las cuáles el público al final va elaborando su propio montaje en escena. Va construyendo esa especie de rompecabezas. En ese aspecto es mucho más sencillo que "Animales Feroces", más lineal y mucho más fácil de reconocer.
Desarraigo y soledad, son sentimientos que surgen como atmósfera en Asia y el lejano oriente. ¿Qué tan actual pudo ser considerado este montaje para el público, más allá de nuestra lectura que como sociedad tenemos de nuestra realidad?
En mi empecinamiento de decir que esto es una fábula, el público pudo haber concluido… ¿esto es lo que nos está pasando a nosotros?…¿qué pasa que no ha cambiado el país en 50 años?…¿éste señor que escribió esto, como pudo visualizar nuestro presente?.
Diría que por ser dramaturgo por una parte y porque además era economista. Considero que existe una gran contextualización, sin manipular nada de la pieza. No quise utilizar un contexto o términos para imitar a lo que nos está sucediendo como país. Sin embargo existe una conexión, aunque es fábula. Pensar que un país diga vamos a venderlo, vamos a someterlo a un plebiscito…. Pero ojo, lo que nos está pasando en Venezuela es un poco la pérdida de la identidad, perdiendo nuestra economía, regalando parte de nuestra producción.
Existe una invasión, ya no en el sentido colonial de la época del siglo XVI y XVII, ti tampoco a la manera del tipo colonial de Roosevelt, cuando invade a Panamá, o las costas de Cipriano Castro. Pero si existe un coloniaje económico, el cual dándole la espalda al imperialismo griego, nos estamos abriendo a otro imperialismo, como lo es el chino.
En el cual prácticamente estamos entregándonos a él, es decir, todo ello no aparece en la obra, pero el público fue lo suficientemente sensible, para pensar que esto que nos está diciendo "Asia y el lejano oriente", nos está pasando a nosotros o nos puede terminar de pasar. Si no tomamos un poco de conciencia de lo que es nuestra identidad y asumimos, más responsabilidad en lo que estamos haciendo como individuos.
El espectador actual que ha aumentado cuantitativamente y no cualitativamente, es un espectador que huye un poco de la televisión, su gran referente. En busca por igual de la gente con un tipo de espectáculo no cuestionable, como lo es la comedia ligera, la comedia bufa. Esto implica que en lo referente a su estilo de creación, en "Asia y el lejano oriente", fue como paso transmitido, entre una pieza de Ibsen Martínez o de O'Neill, en la cual la creación de un personaje profundo, con un discurso de hora y media a dos horas, era el espectáculo. A este que es la creación del actor, que desarrolla ciertos personajes.
Es decir, cada actor debió representar más de diez personajes, en tal sentido nos asomamos a rasgos caricaturescos. Esto logró que el nuevo espectador, que está acostumbrado a ver a "Juan Carlos García", a "La Beba Rojas", vió "Asia y el lejano oriente", y le haya sido sensible y sencillo, tomar el mensaje. Porque obviamente, este nuevo espectador aún no está preparado a obras de teatro con cierta profundidad. Siempre habrá público para ello, pero no éste espectro de público, que plena ahora el micro teatro.
¿Desde el punto de vista de la puesta en escena, que considera fue lo más importante que proyectó?
Lograr presentar un musical donde se vea a Isaac Chocrón en todo su cuerpo y espíritu, para una obra escrita hace más de 50 años. Lo que yo no podía hacer era montarla tal cual la montó Chalbaud, porque fue montada para una Venezuela muy diferente. Hay más concesiones en la pieza de 2014 que en 1966.
¿Qué me puede decir del ritmo en éste montaje, considerando el tempo del musical?
Esto lo medí mucho, en especial existieron dos escenas que fueron las más dramáticas en el sentido que son solamente diálogos o parlamentos: la escena de la oficina, en la cual se hizo una lectura de un grupo de actores que se citan en un teatro, el cual está completamente desnudo, no siendo cámara negra, sino teatro desnudo. En la oficina, sin manipular el texto, se ubican frente a unas barras, para trabajar el cuerpo con las elásticas, y los intelectuales hacen un "manifiesto", en plena sección de fotos.
Luego otra escena en la que están ensayando logramos ese equilibrio entre densidad del mensaje, agilidad del ritmo andante con fuoco, el cual impuso el musical en su misma esencia.
Al pie de ésta nota, lamenté no haber podido asistir a ninguna función de éste espectáculo teatral, por encontrarme en compromisos personales fuera del país. De lo contrario, hubiese aportado mis valoraciones.
Fuente: Julio C. Alcubilla B.- RecordReport en THP –
Artes Escénicas-TEATRO