Los Chocolates más famosos del mundo y el cacao venezolano

Colocando muy en alto productos y derivados del chocolate, como: tabletas, trufas y bombones, obsequian a los paladares más exigentes del mundo, su valor, gusto y evolución….

SUIZA
Considerados por muchos, el país del queso, mantequilla y chocolates, su primera marca de chocolates, Lindt, se impone como marca líder, fundada  en 1845, por David Sprüngli-Schwarz y su hijo Rudolph.  Ésta fábrica Lindt & Sprüngli, ubicada en las afueras de Zurich, ofrece un incentivo poderoso… al final del recorrido, los visitantes gozan de una degustación ilimitada de chocolates, lo cual resulta  un obsequio por demás tentador. La misma nos invita a entrar a la famosa confitería Sprüngli, en Paradeplatz –Zurich de ésta familia de notables, manejada desde  1870. La primera experiencia para el visitante, a nivel de degustación,  puede ser el éxtasis de saborear los famosos Luxemburgerli, su  marca registrada de macarrones. Bajo mi punto de vista, destaca el macarón de Campari y limón, sencillamente, insuperable, al igual que  las trufas al champagne, capuchino y vainilla, con whisky bourbon.

También en Suiza, otras marcas ostentan su gran prestigio chocolatero, como la confitería Vollenweider, en la ciudad de Winterthur, cuyos bombones de chocolate con leche fueron considerados como los únicos que viajaron al espacio, en el equipaje del astronauta Claude Nicollier en 1999. Otro bastión chocolatero de Suiza, lo representa La Chocolaterie, ubicada en el pintoresco San Gall, que funciona como café en la planta alta y en el subsuelo cuenta con un taller de chocolate, en el cual nos podemos poner el delantal y, paso a paso, con el maestro chocolatero, fabricar distintos tipos de chocolates. Por su parte, "El País del Chocolate" de Maestrani, es inolvidable, pues a modo de una galería-museo temático, ubicado en la ciudad de Flawil; reconocida como "La casa Frey, en Buchs", es poseedora de tener la receta original y secretísima del verdadero chocolate suizo. Y por último, no podemos olvidar, el Shop de los Maestros chocolateros de Villars, en Villars, una de las últimas fábricas artesanales de chocolate que quedan en el país helvético.

ESPAÑA
La "Madre Patria" de los Venezolanos desde la Colonia… en materia de chocolatería, se hace notable por la ciudad de Valencia y su chocolatería Totel, una de las pastelerías más emblemáticas del país ibérico.  Famosa por sus bombones, trufas y maravillosas tabletas de chocolate (chocolatinas). Paco Torreblanca, su maestro pastelero, es considerado el padre de la repostería contemporánea ibérica y fue el autor de la tarta nupcial del Príncipe Felipe y la Princesa Letizia; representado por La Gianduja Real (un bombón de chocolate con abundante pasta de avellanas), elaborada con un equipo de casi 50 personas. Otro hito español en la materia es la Chocolatería Cacao Sampaka, de Barcelona, la cual desde el 2000, es pionera en la misión de combinar dulces y salados.

BÉLGICA
Por su parte, Bruselas en Bélgica,  es considerada como la capital del lujo en materia de chocolates, pues concentra las tiendas de chocolate más lujosas del globo. Una muestra de ello, Godiva, la primera marca en instalar el concepto de chocolate Premium. Fundada por el maestro Joseph Draps hace casi 80 años, con más de 450 sucursales en todo el mundo. Se le reconoce por colocar sus bombones en un pedestal, a modo de joyas gastronómicas y mantener su alto nivel, llegando a  producir diversas colecciones,  de invierno y verano, como si se tratara de una boutique de alta costura. Su tienda queda ubicada céntricamente en  Grand Place, la cual en su tentadora vitrina destacan sus cucuruchos de papel con fresas, trufas y gomitas cubiertas de chocolate, que nos ofrecen una suculenta y olorosa bienvenida. Un local que pareciera un sed del cuento de Alicia en el País de las Maravillas, delicadamente tapizado con cajas en forma de corazón, forradas con satén rojo, que simbolizan a la marca. 

En el verano de 2013,  se exhibieron varias novedades, como las cocktail truffles, trufas rellenas con sabor a trago largo, (como mojito, bellini de durazno o daikiri de cambur, etc.) Se puede degustar por igual, el delicioso licor de chocolate, el Chocolix, además de tartas y galletas, pero  quizás lo imperdible es el Gold Ballotin de bombones. Una caja de 36 unidades, la cual cuesta aproximadamente  50 euros,  y  consta de un surtido de piezas con nueces, frutas, crema de caramelo, chocolate negro y blanco.

En Bruselas, por igual se encuentra Pierre Marcolini, un maestro chocolatero que todos los años también renueva su colección. El propio Marcolini viaja frecuentemente a México, Madagascar y Trinidad, en busca de las mejores cosechas de cacao. A su regreso, se adentra en su taller y, con la obsesión del perfumista de Patrick Süskind, alcanza el diseño de sabores ácidos, dulces y amargos. Combinando sus chocolates con café de la isla de Java, vainilla de la Polinesia, galletas de Bretaña, champagne francés y trufas.  Por otro lado, Charlemagne, Galler, proveedora oficial de bombones de la realeza belga, y Guylian, famosa en todo el mundo por sus Sea Shells,  rellenos de praliné y decorados con motivos marinos.

FRANCIA
Ubicada su gloria chocolatera,  al cruzar los Alpes, en la cual en primer lugar destaca la pequeña ciudad de Tainl'Hermitage, en donde nacen los célebres bombones Valrhona, creados por el repostero  Albéric Guironnet. Esta maravillosa firma, recoge a los maestros chocolateros del mundo y a una escuela de maestros chocolateros, dedicada a  jóvenes aprendices que quieren seguir los pasos del gran Albéric. Para 20213, se creó "La ciudad del chocolate Valhrona",  la cual es hoy en día, un gran centro de capacitación para alumnos de todo el mundo.

La tradición chocolatera de París, no pudiese ser citada, sin el trascendente impacto de Jean-Paul Hévin, famoso por sus frutas cubiertas de chocolate, golosinas y tartas, que se sirven con el té, en su local de Rue de Faubourg. Otro gran clásico, la tienda de Michel Cluizel, en la Rue Saint Honoré, que sigue la tradición familiar de hacer el chocolate en base a granos de cacao de origen único (de una sola plantación bien delimitada).  Y Patrick Roger, en la hermosa ruta de Saint Germain des Près, el cual se caracteriza por elaborar sus chocolates con mixturas de cacao ghanés, ecuatoriano y venezolano, agregándole sabores como lima y pimienta negra. Además  del maestro Christian Constant, con su tienda en la Rue Saint Placide, que ha hecho de su  chocolate con piel de naranja, con notas de especias o hierbas, o su famoso "palet d'or", confeccionado a partir de crema y chocolate negro venezolano.

Finalmente, la tienda de Pierre Herme, el chef de repostería más célebre del mundo, en la boutique de Saint Germain, es elogiado mundialmente por sus pasteles de chocolate, bombones con semillas de sésamo caramelizado o ganaches con naranja y balsámico. El pastel favorito de la casa tiene un nombre que peculiar… "Muerte por chocolate".