Obligatorio el uso cargador común para todos los teléfonos móviles en Europa

– Acuerdo entre el Parlamento Europeo y los Gobiernos de los Veintiocho.
– "Esto beneficiará a los consumidores", señalan desde el Parlamento.
– Apple o corre o se encarama.
– Parlamento europeo también discute la viabilidad de una medida similar para computadoras portátiles.

Fabricantes de celulares, sin excepción, deberán usar un cargador de batería común en los 28 países que forman la Unión Europea. La decisión del Parlamento Europeo (PE) busca, principalmente, reducir costos y desechos, de acuerdo al texto difundido en un comunicado oficial.

"Estoy muy satisfecha de que hayamos acordado la introducción de un cargador común, a pesar de que el Consejo y la Comisión (Europea) tenían dudas al principio. Esto beneficiará a los consumidores", señaló en la nota la responsable parlamentaria del expediente, la alemana Barbara Weiler.

El texto acordado, establece normas para todo tipo de equipos que usan frecuencias de radio, desde móviles a sistemas de apertura remota para automóviles.

El objetivo principal de la nueva legislación es adaptar las normas al creciente número de dispositivos y asegurar que no interfieren entre ellos y que se respeten requisitos de salud y seguridad.

Los estados miembro tendrán dos años para adaptarse y los fabricantes disfrutarán de un año adicional. El acuerdo entre eurodiputados y los representantes de los Gobiernos europeos prevé además un mayor control del mercado para detectar productos que no cumplan con las reglas.

En la actualidad los fabricantes ya cumplen con varios aspectos de esta norma que tiene tiempo discutiendose en el PE. Entre los ejemplos más notables está el uso estandarizado de un solo tipo de  micro USB para la conexión del cargador. En cuanto a este conector, Apple había logrado convencer a las autoridades que cumplía con los requisitos entregando un adaptador USB para el exclusivísimo conector propietario de los iPhone y los iPad, pero, con la nueva regulación, hay serias dudas sobre las posibilidades de permitir la venta de un dispositivo fuera de las normas, ya que las recién promulgadas son mucho más específicas y duras contra cualquier desvío en cuanto al uso de los estándares.