Desafíos y oportunidades en el negocio de la moda
Por: Victor Moreno, SAP VP de Retail para SAP América Latina
Las primeras impresiones cuentan. Ya sea durante una entrevista laboral, un importante evento de negocios o la tan temida presentación de nuestra media naranja a la futura familia política, entre otros hitos de nuestra vida, la primera impresión no sólo debe ser buena, sino también perdurable.
Es por eso que, a pesar de que nos empeñemos en negarlo, las prendas que vestimos reflejan mucho de lo que somos. La industria de la moda se sustenta en este concepto para generar miles de millones de dólares al año.
En América Latina, las ventas minoristas por Internet continúan creciendo y, de acuerdo con reportes de analistas del sector, se estima que los ingresos derivados de estas ventas se duplicarán hasta superar los mil millones de dólares en los próximos años.
La dinámica de la industria minorista es peculiar. Además de estar sometida a las presiones impuestas por los consumidores, la industria en sí debe enfrentar diversos y singulares desafíos y tendencias.
Entre otras, el fenómeno que se denomina la "verticalización" de la moda, la protección de la marca y el vertiginoso cambio en las tendencias.
La verticalización de la moda explica una nueva tendencia que se refleja en las actividades de los minoristas que anteriormente se limitaban a comercializar bienes y que ahora se dedican a producir sus productos. Esto significa que muchos minoristas han asumido el papel adicional de fabricantes, con lo que logran reducir los ciclos de abastecimiento y, por ende, disminuir los costos asociados.
Esta nueva tendencia también ha incrementado la competencia, ya que compiten también ahora con los mismos fabricantes. Además, la verticalización de la moda ha brindado a los minoristas la oportunidad de poseer su propia marca y, por lo tanto, asumir un mayor control sobre sus bienes.
Sumándose quelas compañías han extendido sus cadenas de valor al lograr que la venta de sus marcas se haga en tiendas especializadas e incluso han llegado al punto de abrir sus propias tiendas para garantizar la venta de sus artículos a precios regulares.
Por lo tanto, los fabricantes se han convertido en vendedores minoristas y su objetivo consiste ahora en proteger su marca, comercializando ellos mismos los bienes bajo sus propios términos.
¿Cómo pueden los minoristas de la región mantenerse al día mientras que la línea divisoria entre los comercializadores y los fabricantes de la moda se desdibuja y la demanda acelerada alcanza su punto más alto de la historia? La clave radica en asumir esta situación como una fuente de oportunidades y en utilizar la tecnología disponible para optimizar los procesos de negocio
Diversos estudios han demostrado que los presupuestos asignados a la tecnología de la información en relación con el porcentaje de las ventas realizadas han comenzado a distribuirse de una forma más equitativa que en años anteriores.
Los vendedores minoristas están ahora aprovechando la tecnología para responder a las exigencias de los consumidores, monitorear los desafíos del mercado, incrementar los márgenes y recortar costos.
Los minoristas de la moda del mundo entero asignan cerca del 1% de sus ingresos a la tecnología de la información, contemplando esencialmente soluciones para la gestión de inventarios y el reemplazo y recorte de la cadena de abastecimiento.
En Latinoamérica están descubriendo que la implementación de una robusta plataforma de software puede constituir una decisión estratégica que les permitirá mejorar el desempeño de la compañía y crecer.
Mediante la implementación de una tecnología integrada para el sector minorista, las compañías podrán mejorar sus procesos de planificación, diseño y ejecución, lo que redundará en aumento de las ventas y en una operación homogénea lo suficientemente robusta como para enfrentar los desafíos asociados con la verticalización de la industria, la protección de marca y la imposición de la "moda rápida".
Al mismo tiempo, mediante la tecnología, podrán recortar sus costos operativos y elevar sus niveles de productividad, a través de la implementación de una solución que aplica elementos analíticos y, por ende, promueve más efectivas actividades de gestión de mercancías, asignación de productos y sincronización con proveedores.
En una industria en la cual uno debe estar preparado para enfrentar lo imprevisto, los minoristas de la moda que están sobresaliendo entre la multitud lo logran con la ayuda de soluciones integradas de software que les permiten administrar lo impredecible y convertir los desafíos en nuevas oportunidades de éxito.
Fuente: SAP