Ciberseguridad: factor determinante en el desarrollo de aplicaciones
La transformación digital es una necesidad cada vez más imperiosa para miles de empresas en la actualidad. La crisis del coronavirus, si de algo está sirviendo, es para poner de manifiesto cómo la digitalización va a ser un gran caballo de batalla para miles de organizaciones en los próximos años.
No obstante, en los últimos meses estamos también asistiendo a numerosos intentos de fraude cibernético y amenazas digitales que deben ser controladas desde el inicio, para evitar daños mayores. Uno de los problemas a los que se enfrenta el teletrabajo es precisamente no disponer de los mismos sistemas de seguridad en la sede de la empresa que en los domicilios de los empleados.
En los últimos años estamos asistiendo a un escenario cambiante en todo lo relacionado con la ciberseguridad. Aumentan los mails maliciosos, los ataques en forma de spam y malware pero aparecen también nuevas amenazas como la minería de criptomonedas. Además, los ataques de ransomware se han vuelto tan comunes que en algunos casos son usados como señuelos por los ciberdelincuentes para ocultar ataques más serios.
En este sentido, uno de los ataques ransomware más conocidos en los últimos años fue WannaCry en 2017, que llegó a infectar más 230.000 equipos en aproximadamente 150 países. Este ejemplo es solo uno más de lo peligroso que puede ser para una organización no proteger su sistema informático, de ahí la necesidad de introducir auditorías de ciberseguridad que midan de manera periódica el nivel de protección de los equipos y la red de dispositivos de la empresa.
¿Qué utilidad tiene las auditorías de ciberseguridad?
Estos procesos tienen como objetivo medir el nivel de seguridad que implementan las empresas en sus organizaciones y detectar puntos débiles que pueden surgir al implementar nuevos programas informáticos y adquirir nuevos dispositivos móviles conectados a la red.
No hay que olvidar que la ciberseguridad es toda una extensa red de sistemas y procesos interconectados entre sí que pueden ser vulnerables ante los ataques externos. Con las auditorías, que se deben realizar de manera periódica al menos cada año, todas las redes ofrecen más claridad sobre su nivel de seguridad.
Estas acciones periódicas pueden ser ejecutadas de manera interna o externa, pero la segunda tiene siempre mayor reconocimiento, pues no media ningún interés más que el detectar esas vulnerabilidades o fallas del sistema.
En la actualidad la ciberseguridad se ha convertido en un elemento fundamental de la cultura organizativa de cualquier empresa, pero por lo general, las amenazas a las que se les presta atención son aquellas que han ejecutado daños en el pasado. Un buen proceso de auditoría de este tipo es aquel que también ofrece medidas proactivas encaminadas a detectar con prontitud esos futuros ataques a la red.
Confiar en los profesionales
Hoy en día todas las empresas y proyectos digitales deberían destinar recursos para la implementación de auditorías en su ecosistema y llevar a cabo esta tarea de la mano de profesionales del sector.
En MTP son una empresa de ciberseguridad consolidada y con larga experiencia en este ámbito. Su trayectoria le avala, más de 30 años en el sector de Digital Business Assurance, especialmente en el aseguramiento y consultoría de calidad de software.
Esta empresa fue la primera en el mundo en certificarse en máximo nivel del modelo TMMi y tres años después volvió a demostrar la madurez de sus procesos de testing y aseguramiento de la calidad de software obteniendo nuevamente el certificado en ese modelo.
MTP servicios de ciberseguridad destaca por aspectos como el modelo de prevención de defectos, que permite prevenir de media un 18% de los defectos que se detectaban con posterioridad y dedicar así más esfuerzos a pruebas de optimización y aseguramiento en fase temprana del ciclo de vida de esas amenazas.
Así, la empresa responde fielmente a uno de los objetivos claro de las auditorías de ciberseguridad, poner en marcha medidas proactivas que tengan como finalidad detectar a tiempo posibles amenazas futuras a la estructura empresarial.
¿Qué riesgos evitan las auditorías de ciberseguridad y cómo mejoran la estructura digital de cualquier organización?
Las auditorías ofrecen a las organizaciones claridad, conocimiento y validación de los métodos de seguridad que están utilizando, así como la vulnerabilidad de esos sistemas. Además, lo hacen desde un punto de vista neutro y objetivo que, en caso de que sean elaboradas a partir de terceros, pueden ser más precisos. Por otra parte, ayudan también a validar las políticas de privacidad y los métodos empleados para garantizar la seguridad en el ecosistema.
Todas las empresas manejan diariamente una cantidad ingente de información personal y es su obligación mantener todos esos datos al resguardo, libres de posibles ataques. Las auditorías de ciberseguridad ayudan a determinar el grado de exposición a los ciberataques, las filtraciones de información, los problemas con la privacidad de los usuarios y el uso indebido de bases de datos. Y para que todo esto funcione de manera óptima, la clave radica en confiar en profesionales experimentados, como es el caso de MTP.
Fuente: THP/Unancor