Impresión digital: solución eficiente para imprimir revistas y catálogos

La función principal de la impresión ha sido, tradicionalmente, la de reproducción de textos. Primero fue la Biblia, luego libros, y ya en la era moderna, para imprimir revistas, folletos o catálogos. Para estos fines, la impresión digital se ha convertido, en el presente, en una solución muy eficiente, por la altísima capacidad de personalización inherente a esta tecnología.

Eche un vistazo a empresas de impresión online de su zona y le sorprenderá lo sencillo y rápido que resulta realizar cualquier trabajo. Nuestros lectores de México pueden acceder a alguna imprenta digital local para descubrir todas las ventajas. Nuestros lectores españoles pueden ver esta otra opción para imprimir revistas, catálogos y folletos. A pesar de que hoy en día, este tipo de imprenta es fundamental, su historia, si la comparamos con la impresión en general, es muy corta.

La historia de la impresión se inicia cuando Johannes Gutenberg desarrolló la imprenta en 1493. En cuanto a la primera impresora digital a color, su aparición ocurrió, casualmente, 500 años después del invento de Gutenberg. Y es que esta primera impresora fue presentada por Indigo en 1.993. Ese año es tomado como el del inicio de la impresión digital.

El nombre de esa, en su momento, novedosa línea de impresoras, surge de la empresa que fundó Benny Landa en 1977, buscando desarrollar la fotocopiadora más veloz del mercado.

Durante su trabajo de IyD Landa observó que la tinta especial que desarrollaron para la nueva fotocopiadora, llamada ElectroInk, también podía ser usada en impresoras. Esta tinta utiliza micro partículas de color suspendidas en un líquido oleoso llamado Isopar, que tiene la característica de ser repelido o atraído por diferencias de voltaje. Al imprimir, esta tinta forma una suerte de delgada capa plástica sobre la superficie impresa.

Esta primera impresora digital a color, la Indigo, provocó una inmediata y enorme transformación en el mundo de la impresión. Hizo posible imprimir cantidades mínimas de copias de mucha calidad, con temas altamente personalizados y directamente de la computadora a la impresora (hoy día incluso directo desde el smartphone).

El experto en la industria de impresión Chris Baker, quien fuera vicepresidente de Indigo y de HP (empresa que adquirió a Indigo en 2001), predijo que «la impresión digital estará en todas partes en el futuro. No solo se usará para impresión comercial, sino también (en el ámbito) editorial y para empaques. Creo que las impresoras digitales se desarrollarán para atender el mercado de empaques – la personalización de los empaques será enorme en el futuro. Las impresoras digitales también serán más rápidas y se diseñarán para manejar más tipos de impresión.»

Cómo funciona

El sistema de impresión digital ensambla la imagen desde un archivo formado por código (un complejo set binario de números y fórmulas). La imagen es capturada en forma de una matriz de puntos conocidos como píxeles, en un proceso llamado digitalización. La imagen así digitalizada es usada para controlar la colocación y disposición de la tinta, toner o exposición a energía electromagnética, para reproducir los datos.

Hoy en día los sistemas de impresión digital usan sistemas de administración de colores y densidad que permiten imprimir la misma imagen, con el mismo aspecto, sin importar donde sean impresas.

Actualidad

Desde 1993 el mercado de impresión digital ha crecido desde US$ 85,2 millardos en 2010 (que en aquel momento equivaldrían a unos 225 millones de impresiones en papel carta) a US$ 131.000 millones en 2013 (1,1 millardos de impresiones), para crecer 225% desde esa cifra, hasta el año 2024.

La impresión digital ha venido sustituyendo a la litográfica en muchos sectores, incluyendo particularmente al editorial, tanto para consumidores finales como a escala de medianos y grandes negocios. Esto ha ocurrido gracias a alto potencial de personalización y costos de producción sustancialmente menores.

Gracias a la impresión digital ya no es necesario cumplir con las tradicionales economías de escala y ordenar enormes cantidades de copias. Ahora se pueden fabricar solo 100 copias de un catálogo, o mucho menos… El costo por unidad no se verá, para nada, tan aumentado como en el pasado por imprimir menos.

Fuente: EntornoPymes